Pintores Mexicanos

Díaz de León Francisco

Fecha de Nacimiento(Defunción):Aguascalientes (1897-1975)

Francisco Díaz de León

Francisco Díaz de León Nació el 24 de septiembre de 1897 en la ciudad de Aguascalientes. En 1917 llegó a la capital del país para ingresar a la Academia de San Carlos. Comenzó a practicar el grabado en la Escuela de Pintura al Aire Libre de Coyoacán, en 1922. En 1925 fundó la Escuela de Pintura al Aire Libre de Tlalpan, de la cual fue director y maestro de grabado. En 1929 por iniciativa suya se organizó el taller de grabado en la Escuela Central de Artes Plásticas, llamado Artes del Libro. En 1930 se le nombró director de la escuela. Ese mismo año, junto con Gabriel Fernández Ledesma, fundó y dirigió la Sala de Arte del Departamento de bellas Artes de la Secretaría de Educación Pública. En 1937 fundó la Escuela de las Artes de Libro, que comenzaría a funcionar bajo su dirección al año siguiente.

Al conocer la obra del grabador yucateco Gabriel Gahona "Picheta", en el 1942 se trasladó a Mérida para estudiar de cerca su producción, promoviendo su difusión en conferencias y artículos. Creado ese mismo año el Seminario de Cultura Mexicana, aparece como miembro fundador. Participó en numerosas colectivas en el país y en el extranjero. Su actividad como pintor y grabador se vio completada con abundantes artículos sobre artes gráficas.

Ilustró varios libros con grabados entre los cuales destacan "Epigramas", de Carlos Díaz Dufoó; "Oaxaca", de Manuel Toussaint (1926), camafeos en madera de pie; "30 Asuntos Mexicanos" (1928), álbum con maderas; "Viajes al Siglo XIX" (1933), de Enrique Fernández Ledesma, aguafuertes y "Su primer Vuelo" (1945), cuento escrito por él mismo, con grabados en madera de pie. Paralelamente, hizo ilustraciones para viñetas, ex-libris, periódicos y revistas. Sus técnicas empleadas fueron la madera, el metal y la litografía. Perteneció a la Academia de Artes hasta el día de su muerte, en 1975.

Mujer bañándose
Xilografía

La escritura en madera de hilo tiene parecidas cualidades a la del linóleo, si bien la relativa flexibilidad de éste permite un dibujo más detallado. El xilógrafo pudo entender esta limitación de la madera, que para Charlot era una virtud que hacía posible desarrollar el carácter especifico de la técnica.


El coyote
Linóleo

Una percepción de las cualidades de blancos y negros y sus tonos intermedios, rasgos propios del material del linóleo. Escritura básica para decir las cosas de modo sencillo, con toques anecdóticos no exentos de humor.


Calle pueblerina
Xilografía

La imagen de lo pueblerino sin necesidad del costumbrismo. Un buen trabajo del ritmo lineal entre las formas arquitectónicas, la montaña y los celajes. La graduación de los tonos hace evidente la propiedad gráfica de la madera y enriquece el efecto visual.

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