Altiva
L. de J. Castellot, jr.
Si de mis labios nunca has oído
la más sencilla frase de amor,
antes que verme mal comprendido
ahogué los gritos del corazón.
Por qué te muestras
conmigo esquiva,
por qué tus ojos jamás me ven
y esa boca provocativa
nunca hay sonrisa, siempre desdén
Mi amor fue grande,
pero más grande mi orgullo es,
fueron muriéndose mis ternuras
con tu altivez,
y si algún resto sobreviviera
de mi pasión,
aún tengo fuerzas para arrancarlo
del corazón.