El quelite
A. Esparza Oteo
Qué bonito es el quelite
bien haya quien lo formó,
que por sus orillas tiene
de quién acordarme yo.
Camino de San Ignacio
camino de San Gabriel,
no dejes amor pendiente
como el que dejaste ayer.
Mañana me voy mañana
mañana me voy de aquí,
y el consuelo que me queda
que se han de acordar de mí.
Al pie de un encino roble
me dio sueño y me dormí,
y me despertó un gallito
cantando kikirikí.
Cuando pases por el puente
no bebas agua del río,
ni dejes amor pendiente
como dejaste el mío.
Mañana me voy mañana
mañana me voy de aquí,
y el consuelo que me queda
que se han de acordar de mí.