Prisionero de San Juan de Ulúa
D.P.
Preso me encuentro tras de la reja,
tras dela reja de mi prisión,
cantar quisiera, llorar no puedo
las tristes quejas de mi dolor.
Preso me encuentro por una ingrata,
por una ingrata que tanto amé,
también la ira me dijo, mata,
también la ingrata me abandonó.
Una mañana salí al jurado
y en el banquillo se me sentó,
y el licenciado y el juez de letras
como causante me sentenció.
Pena de muerte pedía la gente,
¡ay, cielo santo, lo que sentí!,
y lo confieso sinceramente,
que como un niño me estremecí.
Un mañana de frío invierno
un pajarillo me fue a cantar;
era mi madre que en forma de ave
a su hijo amado iba a consolar.
No era la barca ni la barquilla
lo que me espera en el ancho mar,
es el horrible San Juan de Ulúa
donde mis penas voy a pagar.