El rogón
Arreglo de Felipe Bermejo
Desengañado estoy
que no me quieres
y obligarte a que me ames
yo no puedo.
A nadien con mi amor
jamás le ruego,
es un capricho
que llevo en el amor.
Tú te aprovechas
por que sabes que te quiero,
y te aprovechas
por que sabes que te adoro.
Desde una vez que rogué
ya me decían el rogón,
y desde entonces
a capricho lo he llevado
de no rogarle
a nadien con mi amor.