Rancho alegre
Felipe Bermejo
Soy del mero Rancho Alegre,
un ranchero de verdad,
que trabaja de labriego,
mayordomo y caporal.
Mi querencia es este rancho
donde vivo tan feliz,
escondido entre montañas
de color azul añil.
Rancho Alegre, mi nidito,
mi nidito perfumado de jazmín,
donde guardo mi amorcito
que tiene ojos de lucero y capulín.
En mi rancho tengo todo:
animales, agua y sol;
una tierra prieta y buena
que trabajo con ardor.
Cuando acabo mis labores,
ya que se ha metido el sol,
a la luz de las estrellas
me arrejunto con mi amor.
Rancho Alegre, mi nidito...
Sólo falta allí una cosa
que muy pronto tendré,
como estoy recién casado
adivínenme lo que es.
Ha de ser un chilpayate
grande y fuerte a no dudar,
que será también labriego,
mayordomo y caporal.
Rancho Alegre, mi nidito...